¿Qué mira el mercado? Acá está el problema. Por eso el discurso de Milei. El Gobierno puede ganar en octubre y, si lo hace, en el mejor de los casos se ubica en la situación anterior a la derrota de la provincia de Buenos Aires y el riesgo país vuelve a 800 puntos. Dificilísimo salir a pedir plata al mercado con esta situación. La pregunta que se hacen otros es si durante esta presidencia de Milei la Argentina va a poder financiarse en el mercado. Los que dicen que no, sostienen que va a tener que conseguir los dólares de otra manera, con más exportaciones, con más superávit comercial. Eso es otro dólar. Para bajar el riesgo del país va a tener que comprar reservas. Eso va a subir el precio del dólar, lo que significa menos consumo, más exportaciones, y enfriamiento.
Joaquín Cottani, que es un economista significativo porque fue el primer viceministro de Economía de este gobierno con Luis Caputo, dijo, en declaraciones publicadas por Clarín, que el Banco Central va a vender dólares si realmente el tipo de cambio toca el techo de la banda, no antes. Y es probable que eso ocurra. “Va a tener que vender dólares, de los pocos que tiene. La economía no da para tasas más altas, pero tampoco hay mucho margen para que el Banco Central intervenga vendiendo las reservas que son necesarias para pagar la deuda. Después de cuatro semanas hacia las elecciones, el rumbo va a tener que cambiar porque no va a haber otra alternativa”, aseguró. Cottani también dijo que hay que hacer cambios que no son tan profundos, para que cambie el humor, y que lo que hay que hacer es liberar el tipo de cambio, eliminar cualquier tipo de controles y anunciar un programa de compra de reservas. Claro, no es tan profundo, pero es un cambio muy significativo para un gobierno que, como tantos otros gobiernos, obtiene un gran rédito político atrasando el dólar, y como todo lo que consumimos está más o menos hecho de dólares, es una forma de mejorar el ingreso. Es una noticia no económica, es una noticia política.
Si es un gobierno de seres humanos, no de superhéroes; si Milei es un presidente, no un emperador, los que están enfrente, gobernadores, sindicalistas, diputados de la oposición, senadores, también empiezan a jugar. Las negras también mueven. Volvemos al mundo de los seres humanos.
Por Carlos Pagni
LA NACION